5 tips para lograr que tu bebé tome agua durante la temporada de frío

*Tomar agua como parte de las rutinas diarias ayuda a crear el hábito de la hidratación sin forzarlo.  

 

Ciudad de México, octubre de 2025.- Mantener bien hidratados a los bebés es tan importante como cuidar su alimentación, y es que una vez que llega el momento de probar alimentos sólidos, el agua se vuelve parte importante de su dieta.

El cuerpo de un bebé como el de todos nosotros está compuesto en gran parte por agua, y pierde líquido constantemente a través de la respiración, el sudor y la orina, así como cuando hay episodios de fiebre o diarrea, por lo que asegurarse de que reciba la cantidad adecuada de agua es clave.

Carolina Muñiz, experta en nutrición infantil de Gerber® comparte 5 estrategias prácticas para que la hidratación sea parte del día a día de forma natural y efectiva:

1. La alimentación como una fuente de hidratación. Desde el nacimiento hasta los seis meses, la leche materna aporta prácticamente todo el líquido que el bebé necesita, por lo que no es necesario dar agua antes de esa edad a menos que el médico lo indique. Pero una vez que comienza la alimentación complementaria, integrar frutas y verduras con alto contenido de agua es fundamental para una buena hidratación.

2. Introduce pequeñas cantidades de agua a partir de los 6 meses. Cuando los bebés ya están comiendo papillas y alimentos sólidos, puedes empezar a ofrecer pequeñas cantidades de agua durante el día. Utiliza vasitos entrenadores de boquilla suave o de popote, para que el bebé se familiarice con beber agua y empiece a distinguir sabores, texturas y objetos.

3. Hidratación especial en situaciones particulares. Cuando hace calor, hubo mucha actividad, exposición al sol o alguna enfermedad con fiebre, vómitos o diarrea, la pérdida de líquidos aumenta. En estas situaciones:

  1. Haz de la hidratación algo divertido y parte de la rutina, sin que sea una obligación.Si tomar agua se integra al día a día como parte de las rutinas, será mucho más fácil que al crecer mantengan este hábito. La mejor hidratación es la que no se fuerza, por eso:

5. En menores de 1 año el agua debe ser libre de sodio. Los riñones de los bebés no están desarrollados por completo, por lo que su dieta hasta los 2 años de edad debe ser baja en sal y el agua que se consume normalmente suele tener altas cantidades de sodio (por encima de 20 miligramos por litro). Buscar un agua hecha especialmente para bebés, libre de sodio, puede ayudar a que su comida no sea alta en este mineral. Además de usarla para beber, también pueden cocinar con ella y asegurar que la ingesta de sal sea mínima.

Y por último, revisa las señales de hidratación, estas se pueden ver en los cambios regulares de pañal, al menos 6 veces al día, orina clara o de color pálido cuando ya está consumiendo agua y un buen estado de ánimo en general, sin resequedad en los labios o boca. Contribuir de forma adecuada a la hidratación de sus pequeños es esencial.

Fuentes: 

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